viernes, 31 de octubre de 2008

Peluquería


Todos los malditos días que voy a ese lugar, todas aquellas tardes, en que quiero extrovertir mi violencia y frustraciones diarias sudando la gota gorda, con gordas féminas que aspiran a modelos (de tallas XL), me topo con la misma frase, la misma puta frase en boca de una mujer en cuerpo de hombre: “peluquería”, con tono de niña inocente y ronco a la vez, todos los días lo mismo: “peluquería”. Mis respuestas han ido variando desde el “no gracias”, hasta el mutismo absoluto, no puedo entender esa falta de tino, esa memoria tan débil incapaz de recordar que el mismo idiota de señas claras con un bolso cargado y cara de cansancio, ¡NO QUIERE CORTARSE EL PELO!, que lo ultimo que haría es preocuparse por su pelo, que no hay cosa que le importe menos que su pelo.

Peluquería sea ha vuelto en un insulto, en un escupitajo en el rostro, peluquería, es la vieja hedionda en la micro que se para al lado tuyo con cara de aborto para que le des el asiento, peluquería es la idiota que todas las mañanas se encuentra con un amigo distinto en el bus y le cuenta que su pololo aquello, esto, lo otro y me deja con ganas de decirle: ¡¿y este hueona…y este?!, peluquería son mis frustraciones restregadas en el rostro, mis fracasos y temores sin afrontar, peluquería es este maldito nudo en la garganta que me abandona a veces, otras me acompaña de sol a luna, eso significa peluquería.

viernes, 24 de octubre de 2008

Análisis psicoanálico de mi mala puntuación.

A ver, pensemos, mejor dicho, piensa. Pienso que es terrible el hecho que deba articular lo que estoy pensando impulsado sólo por un afán egotista. Creo, que más bien, aquel impulso no es degradante, sino, todo lo contrario. Que deba negar mi ego me parece lo bastante terrible. Hace rato que dejo de lado al sujeto, y creo que hace rato me tiene a puertas de una neurosis de carácter apoteósico.
Neurosis. Vale. Deberé reconocer en mi niñez cuáles pueden ser las causas que desencadenan un malestar en mí. Primero: soy un sujeto en extremo reprimido, presento grandes cuadros de descontrol físico y mental. Síntomas: no puedo dejar de marcar, en cualquier clase texto, ya sea panfletario, literario, tecnocrático, las malditas comas. Es un acto compulsivo, una coma acá, una coma allá, allende una coma y, así. Los puntos seguidos también se me hacen problemáticos pero creo, más aún, reconozco, que éstos son un tic con algún grado de control mayor. Con las comas es distinto, es espantosamente distinto, no puedo dejar de invocarlas. Debería apostar que éstas patentan en mí un problema sexual, tan errado no me parece el punto, siempre he visto tanto en el punto y coma como en el dos puntos una relación del tipo sexual. Entonces, ambos signos cuando están juntos pareciesen proyectar una imagen del todo pornográfica: brutal y dura. Veo en esta imagen toda clase de fluidos varios, trajes de látex, humores nauseabundos y violencia, en suma: descontrol. Cada vez más lógico: el punto como pausa es un descontrol controlado y la coma, como acto compulsivo, es un descontrol declarado. Entonces, mi utilización de la coma es un visaje neurótico que responde a mis pulsaciones eternamente reprimidas. Cada vez que utilizo una coma, lo que hago es liberar algún improperio, algún orgasmo con una chica en extremo inocente, golpear a un sujeto equis, cagarme en mis pantalones, ver Dr slump, y un perenne ETC. Mientras tanto, los puntos son una catarsis controlada (si de alguna manera esto puede existir), porque son un pausa, un quiebre, en mi orden institucional, es una chuchada en susurro, una masturbación en el baño (escondido y con segundos para llevar a cabo la misión), un famoso peo en el metro. Entonces en mi escritura ¿qué puedo reconocer con la puntuación en general? básicamente un enfrentamiento social, las comas liberan mis más bajas pasiones, mis más básicas necesidades, que la sociedad no me permite realizar. Los puntos, al igual que las comas, son liberaciones, pero liberaciones controladas. El punto y coma; sexo descontrolado, los dos puntos simplemente: sexo.
Como conclusión, este texto es mi lucha psicológica con la institución que crea en mí una problemática identitaria controlando mis deseos más esenciales. Ahora bien, claramente la buena utilización de la puntuación obedece a las reglas gramaticales, y por tanto, a la institución, al sistema. En consecuencia, cada buena utilización por parte personal, potencia cada vez más mi neurosis, pero, cada vez que observe una coma rebelde, una coma que sobra o que no tiene nada que ver, cada vez que un punto se presente donde no debe presentarse, en cada uno de estos momentos, lo que está haciendo mi subconsciente es una liberación de mí pulsaciones límites. Cada, coma que, no obedezca. Que. No tenga nada que, ver, cada signo, mal puesto (claramente estos. Son intencionales. Por lo cual no deben ser tomados en cuenta), e incluso cada ausencia de. Signos gramaticales, es. Mi inconciente. Que está liberándome, Tómese. Como un orgasmo frente a sus ojos, un. Eructo en la mitad de la comida con su familia, una violación. A un monja, y así.

Presunta solución: Desalinearse, actuar, liberarse, evitar en anquilosamiento. A qué quiero llegar con esto, quizás a un nombre: Osvaldo Lamborghini, lo más factible es que todo esto sea un error de pensamiento…… Saludos..,.

martes, 14 de octubre de 2008

Un PEO en el metro


Un peo en el metro…
No debe de ser tan malo…
Bueno da lo mismo malo o no malo,
a este yo no lo cargo más,
y no por pereza, ni por costumbre,
lo que pasa es que este en especial,
llamémoslo así,
viene contundente,
¿qué tan contundente?
Yo no lo sé,
Sólo el aroma lo dirá, o las caras de los civiles aquí presentes,
Y como dijo el celebre poeta…
“Mejor fuera que dentro”.

Ve hijo mío, vuela libre hacia el espacio,
Vuela cual Icaro a su fatídico destino.

Miro alrededor,
Nadie parece inmutarse,
Nada, todos siguen mirando hacia el vacío,
Barajo dos posibilidades,
O mi querida creación nació prematuro,
O estos insolentes no lo toman en cuenta,
Estoy a punto de enojarme,
Después de todo,
Si yo huelo algo fuera de lo común lo expreso,
Aunque sólo sea con una mueca mal actuada…
Malditos inexpresivos,
Vivimos en comunidad por dios,
Sean solidarios,
Sólo lo sentirán una vez en su vida,
Que les cuesta darle un momento feliz.

Un peo en el metro... despues de todo, entre tanto letrero,
no hay ninguno que prohiba un peo en el metro.

Y como reza nuestro titulo,
TÍRATE UNO PA' BAILARLO!!!

jueves, 9 de octubre de 2008

la tercera, tal vez no es la vencida


La luz da verde y empieza a guiñarme el ojo como invitándome a cruzar rápido, como un polvo a la pasada, una invitación cordial hacia el otro lado de la calle, el orgasmo del cruzacalles. Avanzo bajo el paso de nivel del tren, paso por delante del Hospital y todos los parroquianos afuera fumando sus cigarrillos, exhalando desesperación y angustia, los vagabundos acostados en su rincón con la jauría pertinente a cada lado, con sus barbas enmarañadas y ladillentas como la mía. Llego a la sala de espera, para esperarla a ella, pero la guata no me apaña después del insulto a la hambruna que me pegue a la hora del almuerzo, entro al cagatorio en cuestión y la tía del aseo, me mira con espanto, al ver que entro con urgencia y que su capilla sextina del aseo y ornato va a quedar convertida en una variación grotesca del cubismo (porque había comido choclo). Me ve con la cara de angustia y me dice, mejor salgo y lo dejo ocupar el baño tranquilo. Me dieron ganas de decirle: sabe que quédese no más, si ni hediondo lo hago, pero no tiendo a mentir tan descaradamente.

El proceso en si fue corto, agradable, como todo un cagón debe ser, pero como diablos lo iba a saber, como debería suponerlo, se supone que una institución así, debería tener buenos cagatorios!!!!, mis cerotes flotando en el agua después de una orden expresa de marcharse, se convierten en invitados no deseados, un aborto frustrado, una guagua con retraso, un invalido, una persona que necesita ayuda, esa clase de responsabilidad y compromiso me hizo sentir el asunto flotante, era algo que no podía quedar ahí a sabiendas de que la tía volvería a terminar su labor… su obra culmine. Y que tal si ese era su ultimo día de trabajo o su día de prueba, si su jefe le dijo: Mira Geraldi, si no limpias bien los water esta semana te vay cagando de la empresa me escuchaste!!!....
- Pero jefe piense que tengo dos hijos paralíticos, un marido con distemper y mi perro tiene cáncer testicular, que cuando se echa aúlla, porque se aplasta los huevitos!!!!- replicaría Geraldi con exasperación
- Ahh…ya dije, ya oíste…se dijo y se hizo, ya sabes un water limpio es un culo feliz.

Toda una familia convertida en nada desde el momento en que el asterisco liberó el cebo de moscas. Pensando en todo aquello no podía desligarme del asunto de un zasparaguas! Algo había que hacer…esperar, así que con la nueva descarga tendría que irse o diluirse, pero solo Dios sabe cuan consistentes pueden ser mis campeones, ni mis argumentos tienen tanta consistencia, ellos hablan por si mismos.
Luego de dos intentos, al siguiente decidí no mirar hacia atrás, ni esperar. Si Geraldi me odiaría el resto de su vida por el sacrilegio cometido, es algo con lo que tendría que vivir para el resto de mi vida. Yo solo aprendí una cosa de todo ello, que tal vez la tercera no es la vencida.

miércoles, 1 de octubre de 2008

Quinientos Pesos


- Es como andar en bicicleta, le dice el negro al del afro.

- No es la misma wea poh weon, si una cosa es pedalear y otra ponerlo.

-Es lo mismo te digo, es una wea de instinto, es dejar de pensar y embocar

-Voh y tus comparaciones hueonas.

Doblan en la esquina de la catedral, hace frío a esas horas de la noche, pero con frío o sin él, el empalmamiento no se dejaba amedrentar, era una erección tras otra, tal como ocurrió con el ensamblamiento de modelos T de la Ford, lo mismo, pero en términos verticales

- Mira, ahí van dos putas, ¿ cuánta plata tenis?

- Ninguna poz negro, si voh quedaste de invitar pa mi cumpleaños, cuando empezaras a trabajar.

- Puta la wea!, tengo quinientos, ¿alcanzará?

- Alcanza

- ¿Si?

- Pa sacarte la chucha alcanza poh weon, ¿que hacis con quinientos pesos?

- Mira, los danky cuestan como quinientos peso y eso que son de savory... por este cono que no se derrite, debería ella pagarme los quinientos, si le doy plata es de magnánimo.

- Magnánimas tengo las bolas, que me perdonan por todos estos años de acumulamiento

- Grito y plata….¡¡eso!!..grita poh weon, grita, demas que caen monedas del cielo.

- ¿Vámonos mejor?

- Mejor